Doble moral, la externa e Interna
Yo fui lo que llaman “promulgador” de la Virgen del
Rosario del Pozo, me acuerdo muy bien que antes de entrar al grupo nos dijeron
que íbamos a emitir una promesa “a la Virgen” y que supuestamente era una
promesa en la que prometíamos rezar el rosario y tener un compromiso de oración
diario. Para mi sorpresa resulta que fue un juramento y fue un juramento de
confidencialidad, te explican los líderes que pasará cada nuevo miembro delante
de toda la asamblea de promulgadores y que pondrá su mano en una Biblia diciendo
“yo fulanito de tal….lo juro” se supone que uno jura guardar en secreto todo
aquello que sea revelado intencional o accidentalmente por los miembros del
grupo en cuestión de doctrinas o conocimiento exclusivo del mismo.
Esto para mí en ese entonces fue algo raro, pero como
todos los hicieron y además yo veía a estas personas “promulgadores”
supuestamente mas elevadas espiritualmente que yo, pues hice el juramento, sin
pensar mucho.
Con el tiempo me fui dando cuenta que este grupo me estaba
indoctrinando con una serie de ideas sincretistas, (conocimientos gnósticos,
pseudocientíficos, algunas cosas autenticas herejías como la inmortalidad o
plenitud o la “Nueva Estirpe). También recibíamos historias de los líderes sobre
seres milenarios, monjes que habían vivido miles de años, templos milenarios
escondidos abajo del monte místico, el monte que esta atrás del Pozo de la
supuesta aparición de la Virgen en el Barrio Rincón de Sábana Grande en Puerto
Rico. Nos hacían realizar ejercicios místico-físicos para llenarnos de energía,
ahora sé que sólo eran cosas que se inventaba el vidente Juan Angel Collado en
sus fantasías delirantes.
Este juramento de secrecía o confidencialidad era para
tener aislado al grupo con conocimientos supuestamente privilegiados, que no son
mas que un remedo barato de otras sectas. A nosotros internamente se nos
manejaba la idea de que era porque supuestamente el mundo (así se le decía a
todos los que no pertenecían a la secta) no entendería “tan elevados propósitos”
y no estaba preparado para “tan alta doctrina”.
Ahora entiendo que más bien quedarían en ridículo con
tanta charlatanería.
Por otro lado mi “padre espiritual” y a todos “los
promulgadores”, les obligaron a comprar celulares de UNEFON para poder
comunicarse en red gratuitamente. Estos celulares tuvieron que ser comprados y
sostenidos mensualmente con nuestro propio dinero para un uso de cuestiones de
trabajo del grupo. En realidad eran herramientas perfectas para tener bien
controlados a los promulgadores, bien vigilados día y noche. Además de que no
pocas veces recibíamos llamadas hasta altas horas de la madrugada dándonos
instrucciones de trabajo por hacer para la secta. Teníamos que vernos los
Domingos obligatoriamente para sacar dinero para el grupo, trabajábamos para el
grupo en diversos apostolados sin recibir un solo centavo, y aparte si no les
gustaba a los señores líderes, recibíamos tremendas humillaciones delante de los
demás promulgadores en las reuniones generales o de Misión. La mayoría del
dinero captado por todos los integrantes del grupo para ser exacto el 85%, iba a
parar a la central de la secta en México o en Puerto Rico.
El control estricto de los líderes para con todos los
adeptos en esta estructura jerárquica de la tiranía, se daba mayoritariamente a
través del celular de UNEFON.
Las reuniones, festejos de la secta, material devocional,
pago de celulares, ayuda a sacerdotes del grupo, misioneros de Cristo Sacerdote,
todo era pagado con dinero extra a nuestras metas semanales de dinero.
Ayudemos a acabar con este grupo que se ha convertido en
una auténtica pesadilla para tantas familias que aún tienen familiares en esta
secta destructiva de la misión de la Virgen del Rosario del Pozo. |