Mi testimonio cuando me acerqué a esta entidad sectaria llamada misión Virgen del Rosario del Pozo, es el siguiente:

En 1995 pasaba por una situación difícil en mi vida pues se había muerto mi padre, un amigo de la facultad de derecho me invitó a recibir una estatuita de la Virgen del Rosario en mi casa, me dijo que le rezara 3 días el rosario y que alcanzaría favores de parte de la Virgen si le pedía con fe. Yo lo hice y efectivamente le agradecí el detalle de haberme llevado la Virgen a mi casa. Sin embargo el me empezó a invitar a unas reuniones de un grupo a donde el asistía donde se reunían los promotores de dicha pseudoadvocación. Yo en un principio no accedí, sin embargo fue tanto su insistencia y presión sobre mí que terminé yendo a una de sus pláticas. De verdad todo da la apariencia de ser un grupo católico, cuando les preguntas que de qué parroquia son: se ponen un poco nerviosos y te dicen que son un apostolado que abarca varios países y que su parroquia está en Sábana Grande, Puerto Rico.

Yo les creí, sin embargo me daba un poco de extrañeza el que mi amigo de la facultad me decía que el era un promulgador de la Virgen. Extrañeza porque la palabra “promulgar” es un termino legislativo que habla sobre un acto formal y solemne de dar conocimiento público de la existencia de una Ley. Y eso en el término religioso es algo que se me hacía un poco fuera de lugar. Sin embargo, mi amigo que había estudiado junto conmigo me dijo que no, que promulgar significaba anunciar con autoridad, y que así se llamaban a todos los que se unían a ese grupo de la Virgen del Rosario del Pozo y me decía que era lo más grande que le pudiera pasar a un ser humano.

Cuando mi amigo me invitaba a estas pláticas recuerdo que recibía un bombardeo de amistad, a veces un poco exagerado, me acuerdo que mi amigo me dijo que yo era un candidato ideal para convertirme a su grupo. Yo le dije que si yo podía servir a Dios y ayudar en algo estaba bien, fue así como empecé a "caminar" como “candidato” y empecé a ir a una serie de pláticas llamadas de "candidatos", en las cuáles me explicaban los “7 planos de crecimiento espiritual” para alcanzar “la plenitud” o inmortalidad, también me explicaron que Dios quería sacrificios y al dar ejemplos ellos afirmaron que usaban cilicios (una especie de objeto de tortura con picos para ponerse en la piel oculto bajo la ropa), también que usaban flagelo o disciplina para darse de latigazos en la noche para pedir perdón por sus pecados y que hacían largos ayunos a pura agua, que esto era necesario para ascender espiritualmente.

Esto me sorprendió mucho porque yo sabía que los santos hacían esto, sin embargo esas personas nos estaban como presumiendo “sus virtudes” la verdad se me hizo una actitud algo farisaica y a partir de entonces consideré a este grupo como un grupo de charlatanes, que quieren abusar de la buena fe de la gente para meterlos a una especie de secta, también me molestaba el hecho de que continuamente me repetían que la Iglesia Católica los perseguía, porque estaba esta en un relajamiento espiritual y que la misión era incomprendida por la Iglesia Católica, y que los sacerdotes les tenían envidia.

Como personas serias creo que este tipo de grupos deben de ser denunciados, pues lo único que hacen es manipular a las personas para satisfacer los caprichos de sus líderes, hay una gran hipocresía en estas personas, me acuerdo cuando me pedían dinero me decían “ahora esto es dinero de la Virgen”, les preguntaba ¿Desde cuando la Virgen ocupa dinero?, ellos me contestaban: “Es que la Virgen ocupa dinero para sus oficinas, y muchísimos gastos que tu no vez”. El dinero es malo en la sociedad y la corrompe, pero una vez que pasa a manos de su organización, se convierte en “dinero de la Virgen” y se vuelve “bueno”.

Hay que ser realmente inocente para creerse estas cosas y más de un grupo tan denunciado y con tan mala fama como lo es la misión de la virgen del rosario del pozo.

Espero mi testimonio les sirva de algo.